jueves, 5 de abril de 2012

Mil flores

En mi almohada

Salías del instituto con tu corta falda, llevabas el pelo suelto, no dejaba ver tu cara.
Yo no sabía nunca que decirte.
Caminabas despacio como si a alguien esperaras.
Yo me hacía ilusiones, ilusiones vanas.
Tu nunca me mirabas a la cara y yo te imaginaba en mi almohada.

No tenía nada mejor que hacer que mirarte.
No tenía nada mejor que hacer que pensar en ti.
Y no me acuerdo de tu nombre, solo de tus piernas flacas.
El resto se me olvidado, también tu cara.
Se habrá quedado pegada en mi almohada.

Y en un vuelco de la vida te has quedado muy atrás.
Yo no soy tan diferente de lo que era en realidad.
Pero el tiempo pone a cada cual en su sitio.
Y aquellas piernas flacas ya no son lo mismo.

Nadie vuelve


Cuéntale que nada es como parece ser. Es todo ciencia ficción, vivimos en una isla desierta.
Cuéntale que da igual lo que llegue a ser, ya que de nada le servirá cuando se marche para no volver.

Si no quieres aceptarlo vete lejos de aquí, pero de nada servirá huir.

Solo soy en ser tan estúpido, al que llaman racional, que no entiende nada de nada de esta absurda realidad.
Me tiraría de cabeza al mar si encontrara allí toda la verdad, aunque ese fuera mi último momento en este mundo.

Nadie vuelve, tu tampoco y algunas veces te hecho de menos.

Como el que no sabe de nada y vive sin reloj, no pendiente del tiempo.
Como el que no está preocupado de su futuro y anda cara al viento.
Y si no ocurre nada más, es que nada más debe ocurrir.
Y si tu vida es de color gris, es que no hay otro color que elegir.


La estación del Sur

Te esperaré sentado en un rincón hasta que decidas volver.
Haciendo pajaritas de papel con tus cartas gastadas de tanto leer.

Se ha secado mi lagrimal.
Se ha encogido mi corazón.
Los recuerdos en un cajón sin fondo, ni llave que lo pueda abrir.

No te olvidaré y tu me olvidarás.
Serás feliz, yo nunca jamás.
Tengo tu imagen clavada, en la estación del Sur, cuando te alejabas para siempre.

Hoy me siento un muñeco de trapo lleno de alfileres clavados.
Un artista que ha perdido el arte, un hambriento que no tiene hambre.

Aquí estaré, borrando con alcohol aquello que nunca pudo ser.
Lamiendo las heridas de mi piel, como un gato sin dueño y sin ganas de comer.


Mi neurona


Condenado a ser siempre vulgar, destinado a no hacer nada importante.
He nacido para ser uno más, una anécdota, un simple instante.

Como una vela sin su mecha, sin nada que alumbrar.
Como una estrella sin su cielo, si nada que anunciar.

Y es que mi cabeza no da para más, busco en un rincón y no encuentro nada.
Y es que mi neurona no puede mas, siempre anda ocupada, siempre despistada.

Y así no me puedo concentrar… y así nunca podré destacar.

Condenado a ser un tipo normal, destinado a una existencia mediocre.
Invisible como un cristal, que se cambia cuando alguien lo rompe.

Como un poeta sin poema para recitar.
Como una paloma sin sus alas, sin poder volar.


Mil flores

Mil flores para ti he plantado en mi jardín.
Mil besos te daré todas las mañanas.

Convertiré tu vida en un paraíso.
Serás mi princesa, mi único destino.

Mil vidas viviré para estar cerca de ti.
Mil veces treparé hasta tu ventana.

Conseguiré que nuestro tiempo se detenga y pondré a tus pies todas las estrellas.

Saltaremos de un puente sin cuerda ni colchón.
Gritaremos muy fuerte hasta perder la voz.

Mil velas soplaré en tu aniversario.
Mil años junto a ti me parecen pocos.

Te abrazaré de nuevo con todas mis fuerzas. Haces que me sienta vivo, tu eres mi motivo.
Juntos construiremos un castillo de cristal, sin puertas ni ventanas, que nadie podrá cruzar.
Y si el tiempo se acabara al llegar a mil, inventaremos un nuevo mundo para poder repetir.


Hoy vengo (* de Mario Castillo Ros)


a saciar tu apetito con el pan de mis letras,
a combatir el silencio de tu soledad,
a sorber la sangre de tu herida etílica,
a morder la manzana de tu pecado muerto de pena,
a sellar tu boca con mi sed,
a rescatar tu sombra de las aceras del olvido,
a prender luces para iluminar pensares,
a amueblar de pájaros las cabezas que nos hacen,
a acariciar violines hasta que los acordes te acaricien los pies del alma,
a llorar la alegría, contigo,
a reírle la gracia al llanto,
a silenciar el latido amargo de un corazón descompasado,
a darle cuerda a tu reloj, enfermo de tiempo terminal,
a asir tu mano para acercar lo lejos y acariciarnos el horizonte,
a otear un cielo preñado de melancolía en el abismo de tus ojos,
a desconocer el miedo,
a conocer tu ausencia escrita,
a conjugar junto a ti, un ser y un estar pareciendo,
a enterrar las piedras de tu camino, HOY VENGO.



Por una vez

Si no me dejas de mirar
me siento como un bicho raro
si me dejaras de gritar
podría oír lo que me dices
si me dejaras respirar

podría empezar a caminar sobre mis propias huellas
podría empezar a ser yo mismo por una vez

como si fuera en un traje de metal
como si no supieras que nada será igual
cuando levante el vuelo en caída libre
cuando me estrelle contra el suelo sin tu colchón


En diciembre

Los dos sabíamos la verdad.
Los dos fingíamos que no pasaba nada.
No éramos capaces de mirarnos a la cara.
Todo ocurrió en diciembre.

No recuerdo que llevabas puesto, no nos dijimos adiós.
Fue tan frío como aquella tarde, aquella tarde de diciembre.

Los dos seguíamos caminos distintos.
Luego fuimos tres y yo era el que sobraba.
Nunca dejamos de ser la tormenta y la calma.
El invierno acabó en diciembre.

Como extraños bajo el mismo techo.
Como amigos con derecho a roce.
Sin hablarnos, sin ningún reproche.
Sin cadenas, sin arrepentirnos.


Lágrimas por Lo

Cara de loco, mirada triste, lindo esponjoso, juguetón.
Pequeño trasto, caza palomas, patita rota, peleón.

Lágrimas por lo que tuvimos
Lágrimas porque ya no estás
Lágrimas por lo que perdimos
Lágrimas por Lo

Gordo rubito, ojos de miel, en la ventana, comilón.
Chico tranquilo, andando a saltitos, bebechorritos, dormilón.

Lágrimas por Lo, te tuvimos
Lágrimas porque ya no estas
Lágrimas por Lo, te perdimos
Lágrimas por Lo

¿Como te hecho tanto de menos?
Como te encuentro a faltar.
Lágrimas por Lo


Creative Commons License

No hay comentarios: