domingo, 8 de junio de 2014

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 El sueño era tan sueño

Mirando al mar soñé que la volvía a ver.
La luz me confundió, el aire se apagó.
Y me quedé sentado allí mirando el horizonte hasta que cayó la noche.
Y desperté, sin más, mojado por la lluvia, calado hasta los huesos.
De pronto, me encontré entre paredes blancas, tan solo una ventana
y un rayito de luz entraba tenuemente directo a mi mirada.
Y así fue como creí volverla a ver, con su alegre mirada perdida hacia la nada.
De nuevo desperté y el sueño era tan sueño que ella ya no estaba.
Y nada de nada, nada es real.
Vive en mi mente nuca volverá.
Sigo pensando porque se fue,
pasa la vida y no la olvidaré.
No la olvidaré.


Sé que no


Sé que no, que ya no siento lo mismo.
No me puedo engañar, algo se ha roto en mi.
Sé que no, que ahora la historia es distinta.
Que ya nada será igual, que todo termina algún día.
Incomodo, infeliz, intratable, insoportable, indiferente a la vez.
No lo contaba, yo me callaba por ti.
No lo esperaba, yo me quería morir.


Por ti


Si volviera a nacer, te buscaría. En algún lugar te encontraría.
No quiero imaginar, sin ti, esta vida. Una vida sin ti, nada valdría.
Escucha mi corazón, late deprisa. Late por ti, por tu sonrisa.
Si no la pudiera ver, se detendría. Para que respirar si no tuviese tu compañía.
Cada mañana oigo tu voz, siento tu cuerpo, tu respiración.
Cada minuto que paso sin ti, parece una vida que no tiene fin.
Si no saliera el Sol, no importaría. Me basta con tu luz, con tu alegría.
Si no brillara la Luna, que más daría. Con mirarte a los ojos, me bastaría.
Cada mañana oigo tu voz, siento tu cuerpo, tu respiración.
Cada minuto que paso sin ti, parece una vida que no tiene fin.
Cada segundo lo vivo por ti, el mundo se para si estás junto a mi.
No existen palabras que puedan decir lo que yo siento dentro de mi.
Por ti.
Todo lo que digo, lo digo por ti. Lo que no digo, lo callo por ti.
Todo lo que hago, lo hago por ti. Si no lo hago, también es por ti.

Tristemente


Vivo en un mar de lágrimas oculto que nadie conoce…
disimuladamente.
Llevo un disfraz exterior perfecto que todo lo esconde…
disimuladamente.
Tristemente me acostumbré a vivir triste por dentro.
Tristemente me alejé de ti, soy un lamento.
Tristemente me dejé vencer lentamente.
Tristemente me olvide de mi, olvidé reír.


Sueño en Arabia

Se abre una puerta a mis pies entre la sombra y la luz,
tras la puerta un cristal, tras el cristal estás tú.
Tus ojos fluyen del cristal, reflejan puertas tras de mi,
destinos distintos a elegir y mis huellas se funden en ti.
Y al abrir una puerta, la luz cubre todo tras de mi
y al cruzarla me encuentro otra vez con mil puertas ante mi.
La duda me asalta otra vez. El tiempo devora el ayer.
Abro una puerta y creo ver una silueta de mujer,
la cierro y corro hacia otra, un árbol se abalanza sobre mi.
Después de un silencio en la oscuridad,
abro mis ojos cruzando el umbral.
Y en la luz del cristal puedo ver mil futuros ante mi,
entre la sombra y la luz, mil respuestas a elegir


Sabes

Sabes que nunca miento, oculto la verdad. Crees que lo sabes todo y no sabes nada.
Piensas que hay algo oscuro tras la realidad, no puedes evitar desconfiar siempre.
Vas en contra dirección, yo sigo aquí sentado. No encuentras la solución, la tienes a tu lado.
Vas sin rumbo ni control, estas desesperado,  hoy es el día en que amaneció totalmente nublado.
Sabes que dejé de pensar hace mucho tiempo para no lastimarme.
Deberías aprender de mi, deberías valorarte más para no despreciarte.


Eres

Eres un cielo inalcanzable,
una fruta prohibida que no podré probar.
Eres mi sonrisa en la mañana, mi deseo a media noche,
mi esperanza al despertar.
Y aun no sé como eres.
Eres una luz en mi camino, el sol entre la niebla,
mi luna llena.
Eres la alegría en la tristeza, aire fresco en mi vida,
el remedio de mi pena.
Y aun no sé como eres.
Nada es imposible, nunca es tarde para nada.
Mi cómplice se esconde detrás de tu mirada.
Nada es para siempre, al final todo se acaba.
Mi deseo es detener este instante que se escapa.
Y aun no sabes quien eres?


Utópico

Quiero ser utópico hasta el día en que me muera.
Y seguir pensando que mucho falta y todo queda.
Queda tanto conducir por esta larga carretera.
Mucha curva que trazar, aquí nadie se queda.
Lluvia viento, viento y lluvia, mientras sube la marea
y se asoma el arco íris. La utopía está más cerca.
Más cerca de ti.
Volver a ser el que fui antes de haberme perdido.
Encontrar otra vez la ilusión, sentirme vivo.
No tengo nada que perder, porque nada tengo.
Todo por recuperar, el tiempo me llevará
Más cerca de ti.


Los hombres del futuro


Han llegado de otro mundo y van hablando de las guerras que acabaron con su hogar.
Ni pasado, ni presente, ni futuro les espera, es una raza a exterminar.
Temerosos nos explican que su mundo fue un infierno que ahora polvo solo es.
Solo tienen la esperanza de morir en este mundo olvidando aquel ayer.
Son los hombres del futuro, van buscando un nuevo hogar
y han llegado a nuestro mundo que está a punto de explotar.


No pido nada más

Sabes que no solo quiero hablar, que quiero algo más.
Sabes lo que quiero decir, no te hagas la loca.
Sé que es difícil, ya lo sé, no debería ni pensarlo.
Pero no lo puedo evitar, es superior a mi.
Caminar por la playa, bañarnos en el mar.
Bajo la luna llena dejarnos llevar.
Escalar montañas bajo la luz del sol.
Bajo el cielo azul tu y yo.
No pido nada más, me puedo conformar con sentirte cerca.
No quiero nada más, tan solo ser feliz a tu lado.


Campos de batalla

Recuerdo una vez que me dijiste...
Lo eres todo para mi, el resto no existe.
Ha pasado tanto tiempo desde aquel último intento,
que ya no recuerdo si fuimos felices.
No me digas que no, no lo llames amor.
Ahora sé lo que sientes, lo llamas amistad.
Y yo no entiendo nada, la verdad.
Dices que me acustumbraré a esta situación
y no lo ve tan claro mi corazón.
No me digas que no, no lo llames amor.
Y no lo supe ver hasta que estuvo encima.
Y no lo supe ver hasta que fue muy tarde.
Y no lo pude ver delante de mis ojos.
Y no lo pude ver, o no lo quise ver.
Somos seres que se cruzan y que esquivan la mirada.
Somos como dos extraños que nada cuentan, que todo callan.
Somos campos de batalla, perdiendo guerras, ganando nada.
Somos viejos conocidos que no se entienden, que no se extrañan.
No me digas que no, no lo llames amor.

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